Arthur de Pins y Karim Friha encabezan la delegación gala en Expocómic , Madrid 12 al 15 de diciembre


La participación de autores franceses es un clásico indiscutible en el Salón Internacional del Tebeo de Madrid – Expocómic. Así que, en su decimosexta edición, las grandes firmas del país vecino no podían faltar; en esta ocasión, la delegación gala vendrá encabezada por Arthur de Pins, autor de “Pecados veniales” y referente internacional en el campo del dibujo vectorial, y Karim Friha, que ya desde su obra “El despertar del zélfiro” se ha convertido en uno de los grandes talentos presentes y, a buen seguro futuros, del noveno arte europeo. Entre el 12 y el 15 de diciembre, el Pabellón de Cristal del Recinto Ferial de la Casa de Campo de Madrid bullirá una vez más hermanando los principales pinceles del planeta…

Arthur de Pins (Bretaña, Francia, 1977). Es uno de los mayores referentes actuales del dibujo vectorial, capaz de desenvolverse en los más diversos ámbitos profesionales: animación, caricaturas, pósters, portadas de libros y revistas y, por supuesto, cómic. Conocido especialmente por su trabajo en “Pecados Veniales”, la esencia de su trabajo aboga por la diversión y la sensualidad no exenta de contenidos jugosos, encontrando en su representación de los géneros un campo abonado para disparar mensajes en ocasiones nada solapados tanto a ellos como a ellas. “Antikamasutra”, “La marcha del cangrejo” o “Zombillenium” son otros de sus títulos destacados.

Karim Friha (Maison-Laffitte, Francia, 1980). Uno de esos talentos universales, tanto en forma como en fondo. Y es que este joven autor, de padre argelino y madre andaluza, no pudo evitar dejarse llevar por su innato amor por los pinceles abandonando su formación matemática para centrarse en la belleza del estudio de la Historia del Arte. Conjuga su pasión por los grandes nombres del conocimiento, como Voltaire o Víctor Hugo, con los grandes nombres del entretenimiento moderno como Matt Groening o Tim Burton. Todo bien, todo fluido, todo de lo más apetecible, como demuestra su principal trabajo hasta el momento, “El despertar del zélfiro”.